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¿Cuándo fue la última vez que limpiaste tus lámparas o luminarias? REGRESAR A BLOG

 

 

¿Lo recuerdas? Seguro que te pusimos a pensar, sin embargo es algo muy común olvidar este tipo de tareas.

El mantenimiento en este tipo de artículos del hogar u oficina suele ser nulo o muy escaso, tanto que existen casos en que nunca ocurre.

Por esta razón, te queremos compartir unos consejos para conservar en óptimas condiciones la iluminación en casa u oficina.

 

1. La seguridad es primero

Este punto es el más importante; antes de comenzar la limpieza asegura de desconectar tus focos o lámparas de la fuente de electricidad y dejar que esta se enfríe, para evitar daños de cualquier tipo. Se recomienda hacer este tipo de tareas durante el día para disponer de la luz natural para llevarlas a cabo.

 

 

2. Identificar las partes.

Es importante que al desconectar la luminaria prestes total atención al desmontarla o separar sus partes, para poder colocarla o armarla de nuevo en su lugar sin problemas. Así también identificar los materiales de los que está hecha y tomarlas medidas necesarias en caso de ser muy frágiles.

 

3. Limpiadores adecuados.

Cuando se trata de artículos eléctricos se debe tener el mayor cuidado y precaución. Al conocer el material del que está hecho la luminaria podrás seleccionar el limpiador adecuado para su uso, recuerda utilizar las cantidades recomendadas por el empaque.

 

4. Utiliza un paño.

Empieza retirando el polvo con un paño de algodón, y posteriormente utiliza el limpiador correspondiente al material a limpiar, sea cristal, plástico, aluminio, entre otros.

 

5. No mezclar.

Cuida de no mezclar ningún tipo de producto químico o de limpieza en caso de no ser sugerido por el empaque. Al utilizar agua o líquidos, utiliza en las mínimas cantidades y sólo humedeciendo el paño de algodón para que este seque con mayor rapidez.

 

Los sistemas de iluminación de alta frecuencia o más complejos déjalos en manos de expertos en mantenimiento eléctrico, recuerda que aunque la limpieza y la higiene es importante, tu seguridad es primero.

Ahora estás listo para cuidar de tus lámparas. Recuerda darle limpieza y mantenimiento por lo menos 2 veces al año para su óptimo funcionamiento y mayor durabilidad y disfruta de ellas por mucho tiempo.

 

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