Si hay algo que causa un mal aspecto en nuestro hogar es la corrosión en la grifería. ¿Te has preguntado por qué se oxidan tus accesorios? La corrosión es la forma natural de deterioro o desgaste de los metales, y ocurre por la interacción del metal con el medio que lo rodea.

Los principales factores que realzan la corrosión son la humedad, el aire, la sal y la cal del agua; estos provocan la pérdida de brillo en los metales y disminución de resistencia. Lo que genera una mala apariencia.

A continuación, te mencionaremos algunas sugerencias para el mantenimiento y cuidado de la grifería.

Para limpieza superficial de algunas piezas de grifería es recomendable utilizar un paño de algodón para secar los residuos de agua en cada uso, esto contribuirá a la protección contra la humedad, manchas de sal y cal del agua.

La limpieza periódica es sumamente necesaria. Te recomendamos sea a base de una mezcla de agua tibia y jabón neutro, utilizando igualmente un paño de algodón húmedo para frotar la superficie. Evita los usos de fibras, pulidores, solventes, detergentes y toda clase de abrasivos como ácidos o productos con amoniaco.

Si tu grifería es de acero inoxidable, usa para limpiar alcohol etílico; utiliza un paño de algodón para desinfectar las piezas, recuerda no verter directamente sobre la superficie, siempre utiliza un paño húmedo. Una vez que hayas terminado el aseo no olvides enjuagar y secar completamente tu grifería.

Como último dato, pero no menos importante,  recuerda hacer una limpieza de las rejillas o filtros de los grifos cada determinado periodo de tiempo según sea la frecuencia de uso, con el fin de impedir que el filtro se obstruya y el caudal del agua disminuya.  Acude a un experto en fontanería ya que probablemente, se necesite desensamblar según el modelo de tu grifo.

Esto seguramente te ayudará a prolongar la vida de tus accesorios para baño. Evitarás el daño en su acabado y conservarás en buen estado la grifería de tu hogar.